WONFORD 5/10 – Viaje a Bath

Bienvenidos una vez más al blog de Wonford.

Foto grupal en Royal Crescent.

Esta mañana hemos quedado como el sábado pasado un poco más tarde que durante la semana, cosa que todos los alumnos agradecen. La excursión de hoy es a la ciudad de Bath, una ciudad que cuenta con una arquitectura muy variada y característica además de unos baños romanos. Este conjunto de cualidades le han permitido obtener el estatus de patrimonio mundial de la UNESCO desde 1987. Nos montamos en el bus y ponemos rumbo a ella con premura que el viaje es largo.

Nuestro grupo y el de Cranbrook.

 

Una vez llegamos nos dirigimos al punto de comienzo de nuestra visita, el Royal Crescent. Esta estructura en forma de media luna consta de 30 casas adosadas de estilo georgiano neoclásico diseñadas por John Wood el joven en el siglo XVIII.

 

 

Junto al río Avon y el puente de Pulteney.

 

Desde ahí nos dirigimos a The Circus, una plaza circular que recuerda a un circo romano, el perímetro de la misma es una serie de casas de estilo georgiano diseñadas por John Wood el viejo. De ahí llegamos al puente de Pulteney que cruza el río Avon, lugar famoso por ser la localización de diversas escenas de cine.

 

Todos junto al río Avon.

Por último, llegamos a la abadía de Bath y los baños romanos que están junto a ella. La abadía fue originariamente un monasterio benedictino que data del siglo VII y su arquitectura pertenece al estilo gótico.

En la abadía de Bath.

El cumpleañero.

Antes de terminar, todos le cantamos el cumpleaños feliz David que hoy cumple 15. A continuación los chicos disfrutan de un rato libre para explorar otras partes de la ciudad así como para comprar algún que otro souvenir. Lugares como el mercadillo que hay en la plaza de la reina o la casa de té, Sally Lunn Bun, la casa más antigua de Bath que data de 1482 y en la que vivió Sally Lunn a finales del siglo XVII.

Al llegar a casa la familia le esperaba con una tarta.

 

 

 

 

Nos reunimos de nuevo en la abadía y nos dirigimos hacia la estación de autobuses para poner rumbo de vuelta a casa. Después de recorrer de vuelta las 106 millas (unos 170 kilómetros) que separan ambas ciudades, llegamos a casa y nos despedimos hasta el lunes, que mañana es domingo y como es costumbre es día familiar.

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Andres Cuñarro

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