WONFORD 28/09 – Excursión a Bristol

    Greetings and salutations!

Hoy es sábado y eso solo puede significar una cosa, es día de excursión. Lo que por ende también nos lleva a otro detalle, hoy tenemos una hora extra para dormir.

Nos encontramos en el Coach Park con todos los demás grupos que van a venir. Nos dividimos entre los dos autobuses y pronto salimos hacia nuestro destino de hoy: Brístol. Pero no sin antes hacer una parada técnica en Exeter para recoger al grupo del mismo nombre y así completar el equipo.

En el interior de la catedral.

Después de unas dos horas de viaje llegamos a Brístol, donde pasaremos el día. Lo primero que hacemos es dirigirnos a la catedral Brístol, una contrucción de estilo gótico que data del siglo XII y que por aquel entonces fue fundada como abadía de san Agustín. Los chicos acceden al templo y pueden contemplar las diversas partes de las que se compone.

Foto de grupo con Keith.

Una vez terminado, nos dirigimos al otro lado del parque y podemos observar una obra conocida como naked man, un grafiti obra del mundialmente conocido Banksy. La obra fue realizada en 2006, pero ha sufrido algunos desperfectos por parte de vándalos que le dispararon balas de pintura.

Daniel, Nico, Borja y Alexia junto a la obra de Banksy.

Aday, Iago y David curioseando por el mercado de san Nicolás.

Continuamos caminando para encontrarnos con el mercado interior de san Nicolás, en el cual nos paramos unos minutos para explorar un poco y comprar algún que otro souvenir.

Por último, llegamos a Cabot Circus, un gigantesco centro comercial, que no está completamente cubierto y en el que paramos para comer. Situamos un punto de reunión en él para encontrarnos una vez acabe el tiempo libre disponible y nos despedimos hasta entonces. Cada cual decide en qué aprovechar este tiempo del que disponen: algunos aprovechan para hacer compras y otros para explorar otras zonas cercanas de la ciudad.

Daniel, Loreto, Uxía y Albany en el mercado de San Nicolás.

Nos reunimos de nuevo para ponernos en marcha hacia el lugar donde nos espera el autobús para así poder volver a casa. Después de recorrer los 135 kilómetros que separan ambas ciudades, nos volvemos con las familias anfitrionas y nos despedimos hasta el lunes muchos de nosotros, mañana toca día de descanso con las familias.

 

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Andres Cuñarro

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