Como la primera visita a Londres les supo a poco a los chicos y chicas conseguimos volver este domingo y darle una segunda oportunidad a la ciudad. Esta vez no estaba tan abarrotada de gente por lo que la experiencia fue más reconfortante.
En primer lugar visitaron Buckingham Palace y llegamos justo cuando estaba teniendo lugar el cambio de guardia, por lo que en esa zona sí que había mucha gente y no pudieron disfrutarla tanto como hubiese sido deseable.
Desde ahí pasearon por Hall Mall, algunos de ellos sin separarse los unos de los otros. Allí tuvieron la oportunidad, una vez más, de acercarse a las tan conocidas ardillas londinenses ya que está rodeado de jardines.
Sin embargo, a pesar de los emblemáticos sitios que uno se puede encontrar en Londres, algunos chavales estaban más emocionados con los coches que veían por las calles.
También tuvieron la oportunidad de visitar Leicester Street, una de las calles con más vida del centro de Londres. En ella pudieron disfrutar de bailes y espectáculos en plena calle.
Después de comer nos dirigimos a Covent Garden, una zona preciosa llena de puestos artesanales y de tiendas de lujo con un ambiente muy divertido.
Y así fue como muy rápido se acabó otra excursión más.
