Buenas tardes a todos y todas! Siento la tardanza en esta publicación, pero por motivos de salud no pude hacerlo antes.

Parece mentira, pero hace ya una semana que comenzaba esta aventura tan especial. Una semana después, los alumnos están ya acostumbrados a la vida aquí, hasta el nivel de que su vida anterior parece haber sido un sueño, y que esta ha sido siempre su vida.

De todos modos era lunes, y da igual que sea España o Inglaterra, los lunes son siempre duros. Algunos fueron capaces de llevarlo gracias a su porción de pizza, y probablemente sin ella no habría sido tan fácil.

En cuanto acabaron las clases tocaba hacer la actividad del día, la cual se llamaba Workshop Art. Y probablemente os estaréis preguntando: ¿Workshop Art? ¿Y eso qué es? Los alumnos se preguntaban lo mismo.

La actividad se trataba de dibujar el contorno de la mano, y entonces escribir a lo largo del transcurso de la línea varios adjetivos con los que los alumnos se sintiesen identificados, como podéis ver en esta foto.

Los que lo tenían más complicado eran los alumnos con las manos más grandes, que si ya de por sí les costaba pensar en adjetivos sobre sí mismos, el hecho de tener que pensar más que los demás lo hacía aún mas complicado.

Aún así, el hecho de tener las manos pequeñas tampoco simplificaba el trabajo, ya que como podemos ver aquí, al principio intentaban ayudarse para poder pensar en nuevas palabras que podrían poner.

Aunque pareciese imposible, al final todos acaban consiguiéndolo. Ver el antes y el después es todavía más satisfactorio, sobre todo en los alumnos que no solo decoraban el contorno con adjetivos, si no que también decoraban el interior.

Había varios trabajos que resultaron ser increíbles, como lo es este de Gisela, una alumna española del centro que, aunque no formara parte del programa en un principio, ahora es una más del grupo.

A algunos les llevó más tiempo que a otros, pero al final todos acababan terminándolo.

Por último, aquí podemos ver el resultado final. Poco a poco, el grupo se va haciendo más grande, ya que la alumna española no es la única integrada. Varios alumnos ingleses han ido manifestando su deseo de apuntarse a las actividades con los estudiantes españoles, y aquí podemos ver el resultado, donde todos posan orgullosos con el trabajo que tanto tiempo les llevó.

Una vez terminada la actividad, cada uno pudo irse a su casa y descansar después de un duro comienzo de semana.