Hola hola familiaaaas! Aquí estamos de nuevo para traeros más novedades de nuestros días en Liverpool.

Por la mañana en Lila estuvimos conociendo refranes en inglés y hablando de Halloween y situaciones paranormales con Mark y jugando a juegos de mesa con Jamie. Jugamos al Scrabble, al Monopoly y a Cards Against Humanity. El momento más divertido de todos fue jugando a un juego que era como el teléfono estropeado pero con dibujos nuestros. Es decir, uno decía una frase y después otro tenía que dibujar esa frase. Al acabar, a partir de ese último dibujo se tenía que escribir lo que se creía que era para así el siguiente hacer un dibujo de esa última percepción. Y así todo el tiempo. Salieron cosas muuuuuy graciosas.

De tarde visitamos el Tate Museum, un museo de arte moderno que lo único que podemos decir al salir de él es que no entendemos el arte. ¿Cómo puede valer millones un cuadro pintado todo de naranja? ¿O unos sacos de lentejas y habas situados en el suelo? De verdad que no entendemos nada. Aunque bueno, algunos cuadros o esculturas curiosas si que había. Pudimos ver hasta un Picasso o un Juan Miró! Por eso si que valió la pena.

Hubo también un medio rifi rafe con una de las encargadas del museo por sentarse en uno de los bancos que estaban para sentarse. Inexplicable. Hubo muchas cosas de esta parte del día que no pudimos entender pero conseguimos ganar una caja llena de caramelos. El resto ya dio igual! Bien podíamos juntar todos los envoltorios dentro de un plato y venderlo por 50000 euros. Yo creo que colaría.

Mañana vuelve a tocar yoga. Esperemos que esta vez la profesora vaya un poco más despacio porque sino ya nos veo a todos echando los pulmones por la boca. Ya os contaremos! 🙂

Raquel Blanco Osorio