¡Buenas tardes, familia! ¿Qué tal estamos por aquí? 🙂

Hoy venimos a contaros qué tal ha ido nuestro ya ¡segundo viernes en Cobham Free School!

Hoy ha brillado el sol y los rayos nos han acompañado toda la mañana. Ha sido muy de agradecer. Además, gracias a esto, no hemos sufrido atascos ni retrasos en los autobuses y todos hemos llegado más que puntuales al instituto. Nice way to start a day! Por la tarde ya no hemos tenido la misma suerte It rained cats and dogs! 

Hoy, después de nuestra comida y una de las clases de por la tarde, hemos tenido nuestro club de speaking. Pero este viernes, a diferencia del anterior, el speaking ha sido en ¡castellano! Hoy hemos ayudado a nuestros compis británicos a soltarse un poco en uno de nuestros idiomas maternos, ya que lo estudian en Cobham Free School y algunos de ellos se examinarán muy pronto en pruebas equivalentes a las que solemos hacer nosotros en inglés (como, por ejemplo, los exámenes de Cambridge).

Grupo en el intercambio de castellano con los compis británicos.

Grupo en el intercambio de castellano con los compis británicos.

Aunque al principio Helen, una de nuestras profes favoritas de Cobham, solo necesitaba cinco estudiantes voluntarios para participar, todos nos hemos entusiasmado con la idea y con poder devolver algo de amabilidad lingüística a nuestros compis británicos, así que, al final, hemos creado unas dinámicas muy bonitas entre todos.

Después de todo este intercambio, muy interesante para ambos idiomas, nos hemos subido en nuestro adorado bus 411 dirección Kingston, para darnos un chapuzón en la piscina del Kingsfisher Leisure Centre, a donde nos acompañó, como ya es costumbre, nuestra guía Noor, ¡ya es una más del grupo!

Pero… chan chan chan… ¡cosas del directo! Finalmente, por una cuestión interna de seguridad de la piscina (no había suficientes socorristas), no pudimos darnos ese ansiado (o no tanto) chapuzón en la piscina. Pero, ¡aquí no ha pasado nada! En lugar de ir a la piscina, al final pasamos la tarde en un recreativo del centro de Kingston. Todos parecían mucho más entusiasmados que con la idea de la piscina, así que, ya se sabe, no hay mal que por bien no venga.

Algunos han jugado una partida intensísima al billar, otros han aprovechado para hacerse un montón de fotos en el fotomatón, jugar un mano a mano en ping-pong o acumular tickets para conseguir una taza de Harry Potter (para la próxima lo consigues, Alma, estamos seguras).

En fin… una tarde de lo más lúdica.

Mañana nos vamos de museo a Londres y aprovecharemos también para ir a Camden Town y comprar quizá algún souvenir por allí, ¡aprovechad y pedidles recuerdos de esta bonita ciudad a vuestros peques, que pagan ellos! (o al menos eligen ellos). Ya os contaremos qué tal nos va el fin de semana, pero pinta bien la cosa, aprenderemos muchísimo en el British Museum con nuestra guía.

Esperamos vuestros comentarios con mucha ilusión ¡no seáis tímidos! que nos dan envidia (de la sana) los demás grupos con varios comentarios en todas las publicaciones 🙁

Abrazos,

Carlota y Sandra