Empezamos el mes con la segunda excursión por la pequeña ciudad donde estamos. La semana pasada habíamos visitado el ayuntamiento en profundidad y habíamos conocido…¡hasta al alcalde! Sin embargo, esta vez tuvimos tiempo para hacer compras y disfrutar de un paseo por las calles de la ciudad.
Por la noche, el cansancio no hizo que nadie quisiera quedarse en sus casas y todos tenían ganas de ir a la discoteca que habían preparado para nosotros en el colegio. Además, iban a ir algunos de los buddies de nuestros chicos.
Todos, tanto las monitoras como los niños, lo pasamos verdaderamente bien y nos llevamos un recuerdo muy bueno de esta noche.