Aquí estamos un día más; esta vez un día especial.
Hoy ha sido un día muy interesante. Hemos tenido el primer día de clase y también el primer plan fallido. Eso sí, nos lo hemos pasado en grande.
Por la mañana nos ha tocado madrugar para estar tempranito en el instituto. Casi todos llegaron con muchos nervios. ¿Cómo sería el instituto? ¿Y las clases? ¿Serían majos los compañeros? Todas esas preguntas se iban acumulando hasta que a las 8.30, bien puntuales, entramos al instituto. Allí nos dieron los horarios de cada uno y nos presentaron a los buddies (los compañeros que les ayudarán en el instituto), quienes nos enseñaron el centro. Eso sí, es tan grande que casi no nos acrodamos de casi nada de lo que nos enseñaron. ¡Menos mal que nos han dado un mapa! Nos han asignado un aula para nosotros solos, así que en el “tiempo libre” (que es bastante) (o cuando queramos) podemos quedarnos ahí.
Todo iba bien… hasta que salimos del instituto. Se suponía que por la tarde íbamos a dar un paseo por Bournemouth. El plan nos lo chafaron los buses. Fuimos a la parada y el bus hacia la ciudad se retrasó 40 minutos, así que llegamos tarde y después ya no pudimos hacer nada. Así que simplemente fuimos y volvimos. Ha sido un corto paseo en bus.
Mañana tendremos otro paseo en bus; y este bien largo. Eso sí, no sólo será ida y vuelta. ¡Conoceremos Londres! Esperemos que a pesar del madrugón nos lo pasemos en grande y conozcamos una de las capitales más importantes del mundo.
¡Hasta mañana!
