SWORDS — 21, 22 y 23 oct

¡Buenas noches familias!

El fin de semana y este maravilloso lunes nos han dejado con poquita energía pero con muy buen cuerpo. Hemos hecho un montón de cosas y hemos pasado por mogollón de estados de ánimo diferentes. En general, estamos todos/as muy contentos/as con la experiencia en Irlanda y en el grupo se respira felicidad en el ambiente.

¿Queréis saber más? Pues vamos allá con los detalles…

Día 21 – Como Pepe por su casa

El sábado (recordad que es el día libre) la chavalería decidió ir hasta Dublín centro. Con toda la ilusión de los adolescentes y también con ese sentimiento de comunidad que tienen al hacer planes en grupo, se han montado en el autobús 10 de nuestros jóvenes y se han bajado en el centro como si fuesen nativos de Irlanda…. para ellos/as pasear por O’Connell Street es igualito que ojear tiendas en la Calle Príncipe.

Día 22 – Tortura al caminar, hermosura al terminar

El domingo pusimos rumbo a Bray con Jamie, el guía local que nos acompaña a las excursiones. Tuvimos que coger el bus y después el tren y se nos hizo largo pero mereció mucho la pena.

Tras pelearnos por conseguir asiento en el tren y observar la costa irlandesa, llegamos al pueblo de Bray. Un lugar encantador, con una playa de piedras y un largo paseo marítimo por el que familias y turistas se pasean y toman helado.

Al final del pueblo, se ve una gigantesca colina con una cruz en lo alto….. y si, aunque no querían caminar, el objetivo era subir hasta allí para observar las vistas.

Bueno, el plan, tenía lagunas. Fue bastante tormentoso escuchar las quejas mientras hacíamos la ruta. Pero, no eran quejas sin fundamento. Por resumir, subimos por un camino lleno de rocas puntiagudas, por el que discurría bastante agua y que estaba lleno de barro por todos lados. O sea, que fue como hacer una ruta de alpinismo por los Pirineos o por los Alpes suízos pero equipados con la sudadera roja del programa Vigo en inglés y con las Converse blancas que jamás volverán a ser blancas (lo sentimos, Dori).

Como el camino era arduo, duro, complicado… y la situación sólo tenía comentarios negativos (Laura llegó a decir que la excursión era una nueva forma de tortura infantil), la única paz que encontraron fue a través del rezo (así que Leire, Laura y Claudia pidieron por nuestras almas).

Nada más llegar a la cima del Bray Head, nos sentamos a charlar y a comer nuestro packed lunch y la verdad es que fue una estampa de domingo preciosa. Sara llamó a su familia, Leire hizo de fotógrafa para unas turistas asiáticas, los chicos se sentaron en medio de la hierba para contemplar los acantilados.

Era un lugar muy chulo. Pero creo que no nos quedaron ganas de repetir. Ashley dijo que no volvía a subir ni por 1.000 euros.

Pero, todavía nos tocaba bajar. Y no fue nada fácil, a mí ya me flaqueaban las piernas, y Claudia no se mató de milagro. El que sí se cayó fue el pobre Jamie. Una vez abajo, sanos y salvos, yo ya vi que esta gente en verdad estaba disfrutando… lo de quejarse por todo era palabrería pero ellos estaban en su mundo gozando del día… tanto es así que Pablo casi pierde todo porque no sabía ni dónde lo había dejado. Y, de manera similar, Carla T se distrajo y perdió su chaqueta. Para rematar el espectáculo, Tano sacó su pelota de fútbol y se pusieron a jugar en la playa.

Jimena sacó sus dotes de fotógrafa y se puso a fotografiar rinconcitos chulos que se iba encontrando. Y Sara como loca intentando buscar algún souvenir que llevarse a casa jajaja. Las fotos de Jimena:

Día 23 – El muffin que le rompió el corazón a Sean

Hoy, lunes, tocó taller de cocina. Era algo que venían pidiendo, así que tuvimos que presionar para que la actividad se pudiese realizar, y la verdad sea dicha…. quedamos encantados/as.

Tampoco es que quisiésemos hacer una receta Masterchef… pero algo queríamos cocinar. Y, como os decía, fue todo un éxito (la prueba irrefutable es que si os fijáis muy bien, veis a Laura sonreír jajaajjaja).

 

¿Cuál fue el problema? Que Sean, nuestro profe de carpintería, vio su orgullo dañado cuando la inmensa mayoría de la gente salía con una sonrisa de oreja a oreja y comiendo los muffins de chocolate como si fuesen un manjar. Y claro, nadie se alegra por construir un avión, te lo llevas para casa porque lo has hecho tú y eso… pero los muffins aportan felicidad en forma de calorías jajajaja.

Mirad sus caritas (equiparables a que el Celta sume 3 puntos):

Por outra banda, a Mauro xa lle dixen que na casa cando non lle tocase facer carpintería que lle ía tocar lavar a louza ou facer un postre de cando en vez.

Hasta aquí el reportaje de hoy.

Para más información, contacten con sus hijos/as.

Un saludo.

El monitor que se creía periodista,

Iago.

Iago Rodríguez Diéguez

15 pensamientos en “SWORDS — 21, 22 y 23 oct

  1. Tendremos que preguntarle a Carla por el informe de bajas, esperando que la baja de la chaqueta no sea definitiva… 😅

    Gracias de nuevo por compartir la info, Iago!

  2. Grazas Xornalista Monitor Iago. Son mellores as tuas crònicas que as de Fernando Franco😂😜 imos botar moito en falta este blog cando remate o programa😪
    Non sò aprenden inglès, tamén carpintería, cociña, compañeirismo etc. Propoño tamén q aprendan musica irlandesa dos The Chieftains, e aparquen un pouco a Bad Buenos. Serà moito pedir😝😏?

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