Llegó nuestro merecido finde y con él, nuestras excursiones.
El sábado pasamos el día en la ciudad natal de Shakespeare (Chaquespeare para los que compartimos la lengua cervantina). Disfrutamos de sus canales – patitos y cisnes incluidos, nos atrevimos a tocarlos y darles de comer- su historia y su ambiente.

 
 

No faltó, aparte de unos guías increíbles, nuestra foto de rigor en frente de la casa natal de Shakespeare

Ni tampoco la visita a la catedral donde reposa él y miembros de su familia.

 
 
Reuniendo fuerzas, el domingo, nos esperaba Londres. Con nuestro guía, Des, la visita al British Museum, London Eye, Trafalgar Square, etc, se hizo más que informativa
 
  
 
