¡Hola de nuevo!
Hoy es lunes, y eso quiere decir… ¡Que es nuestro último día en Peterborough! Sniff, sniff…
El viernes tuvimos un día muy completo. Todo comenzó de forma bastante divertida. Cuando parecía que la jornada transcurría con normalidad una vez más, la alarma de incendios empezó a sonar como si aquello fuese el fin del mundo… ¡Tranquilos! Era solo un fire drill, un simulacro, algo muy típico en los colegios a principio de curso. Lo gracioso fue realmente volver a apreciar la clásica corrección inglesa, mientras nosotros los españoles parecíamos estar de fiesta al poder escaparnos de clase durante unos minutos… ¡El día menos pensado acabamos felizmente chamuscados! : )
Por la tarde tuvimos nuestra penúltima actividad deportiva con Sam. Mientras algunos desvergonzados decidieron zumbar un rato, el resto volvió a disfrutar de un mix de deportes variados.
Y por la noche fue nuestra Disco Night de despedida. Fue todo muy emotivo, la verdad, y hasta yo, que soy una persona bastante adusta, se emocionó al ver a los chavales dando sus últimos bailes con sus buddies. The night is young!
