Empezamos la cuenta atrás en nuestra experiencia. Se nota que los días se nos escapan de las manos y queremos sacarle aprovechar al máximo los días que nos quedan por estas tierras.
Para la actividad de hoy, Clip&Climb, debíamos desplazarnos a la ciudad de Exeter a donde llegaron medio dormidos, tras el trayecto en autobús. Pero los ojos se les iluminaron y las sonrisas aparecieron en sus caras en el momento que entraron en el edificio y vieron las instalaciones donde íbamos a escalar. Allí había un montón de paredes con diferentes recorridos por las que deberíamos poner en práctica nuestras habilidades.
Después de escuchar las instrucciones de seguridad y ponernos los arneses; nos colocamos en el primer challenge. Algunos empezaron por los fáciles y los más valientes y/o temerarios se lanzaron a por los más complicados. Dio igual el orden, al final todos pasamos por todas las paredes. Pero la que más éxito tuvo fue una que estaba en medio y en la que no era importante la fuerza sino el equilibrio. Eran varios tubos formando un círculo, cada uno de ellos iba subiendo en altura, y por lo tanto en inestabilidad. Unos decidieron hacerlo rápido y sin pensárselo; otros, sin embargo, más precavidos buscaban asegurarse antes de dar el siguiente paso.
Una vez terminó la actividad, los monitores casi los tenemos que arrancar de allí pues ya les picó el gusanillo de la escalada y querían quedarse allí y probar otros retos.
Lo que dejaron claro es que no les da miedo nada,y lo que se les hace un poco cuesta arriba lo afrontan con valentía y tesón pues si se proponen algo, es para conseguirlo.