¡Saludos desde England!
Hoy como de costumbre fuimos al instituto. Ya pasamos el ecuador de nuestro programa PILI Vigo, ¡quién lo diría! Después de 3 horas de clase y un descanso por el medio recogimos y algunos nos cambiamos los uniformes por ropa más informal, cogimos el autobús más temprano, ya que el colegio cerró antes para prepararse para un evento con los padres que tenía lugar in the evening, y nos fuimos ¡rumbo a Norwich!
En el camino al centro le pedimos a nuestro busero habitual que nos dejara bajar cerca de la estación de tren, ya que cuando volvemos del colegio vemos que hay muchas tiendas por la zona, entre ellas un outlet de Nike, y aprovechando que teníamos más tiempo hasta la hora de la actividad, y de que nos moríamos de ganas de ir, nos dirigimos a gastar libras.
A las 3 nos reunimos de nuevo en The English Experience y nos pusimos en camino a conocer el museo Bridewell de Norwich, donde aprendimos un poco más de su historia, cultura y etnografía.
En 1700 Norwich fue la segunda ciudad más grande y próspera de Inglaterra. En sus calles, iglesias y edificios podemos ver el pasado de la ciudad, ya que muchas son de la época medieval. También podemos observar una influencia normanda, como en el castillo y la catedral.
Es una ciudad de artistas, donde tienen lugar importantes festivales de música y exposiciones, pero también un día tuvo una importante industria, donde se producía y exportaba desde zapatos, ropa, chocolates a aviones y armas. El sector primario también se encontró y se encuentra presente, y dicen que aquí podías encontrar de las primeras compañías aseguradoras para estos importantes trabajadores.
Fueron zapateros con firmas conocidas mundialmente. Fabricaban y exportaban a todo el mundo zapatos de mujer de alta calidad, para los que usaban el mejor cuero, y zapatos ortopédicos para niños. Durante el siglo XX había en la ciudad 26 fábricas de zapatos que contaban con 12.000 empleados, pero la alta demanda en zapatos baratos hizo que este sector decayera y hoy en día ya sólo queda una. En el museo pudimos ver una colección de estos zapatos, unos muy coloridos, otros extravagantes y otros muy elegantes.
Otro oficio en el que destacaron fue en el de tejedores y teñidores de tela. Vimos unos cuantos modelitos que ya debían de tener unos cuantos años encima.
Durante la Segunda Guerra Mundial la ciudad sufrió bombardeos que le dejaron profundas cicatrices. Tras 1945 se remodelaron áreas de la ciudad, como el centro, y se modernizaron las carreteras. Se empezaron a construir edificios altos de oficinas, ya que aquí la mayoría son barrios residenciales con casitas adosadas de 2 pisos (es muy fácil perderse porque todas las calles se parecen).
Así podría ser como luce una de nuestras typical british sala de estar.
Good night and relaxing cup of tea!
