Día 9 y 10 – Descubriendo Bath

Hola familias,

El miércoles y el jueves al fin llegaron los días por el que todos y todas nos llevaban una semana preguntando: “¿y ya que estamos en Bath, cuándo vemos la ciudad?”. Pues bien, el miércoles le tocó al grupo con actividades por la mañana y el jueves le tocó al grupo con actividades por la tarde. Mientras tanto, los que se quedaban en el campus, tuvieron su rutina diaria de clases y actividades, que en este caso eran grabar un reportaje en inglés y jugar al fútbol.

Ambos días, cuando llego la hora, ahí fuimos, 15 minutos y ya estábamos en el centro de Bath…

Nuestra monitora local de Ardmore nos hizo un mini tour por la ciudad, enseñándonos las afueras de los baños romanos, the Circus y The Royal Crescent. Qué atentos estaban todos jeje

Luego ambos grupos tuvieron algo de tiempo libre, que nos sirvieron para ver las diferentes tiendas de las que disponía el lugar. Entre ellas, una tienda llena de frikadas de series, comics y música, un puesto de laminas metalizadas vintage, otro de piedras (donde Vania compró alguna), alguna que otra librería (que Lena aprovechó para comprar una novela de la autora de Heartstopper) y por supuesto, no pueden faltar las tiendas de souvenirs y mucha comida (por cierto, las cervezas son falsas).

El miércoles, tras cenar, Desi y Caro nos deleitaron con un apasionado dance y sing off, mientras los demás jugaban al ping-pong o al volley, cómo no.

También queremos honrar a la pizza de Miguel Ángel y Hugo, que en paz descanse; moriste por los suelos y ahora estás entre los cielos.

El jueves, al volver de Bath nos esperaba otra noche de disco, que la organizaron para que no se la perdieran los que habían estado enfermos el otro día, aunque de nuevo, lo que realmente lo petó fue el futbolín. Con diferencia a la otra vez, he de decir que esta se arreglaron todos y todas muchísimo más, qué se noten los buenos genes!

Yo no sé cómo lo hacen, porque fue tocar cama y estaba en el cielo, pero su energía se vio intacta esa noche y la mañana siguiente.

Un saludo,

Alba e Irene.

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Alba Zels Garrido

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