Buenos días madres y padres.

¿Qué tal va ese primer día sin las chicas y chicos en casa? Como sabéis, nuestro viaje empezó en el aeropuerto de Vigo, donde el alcalde se vino a sacar una foto con todas. Algunas incluso tuvieron la suerte de salir en primer plano en el periódico!

Después de despedidas y más despedidas empezamos con el control de seguridad, en el que todas lo hicieron estupendamente y no hubo ningún problema, salvo que a Vania la eligieron para un control aleatorio, pero en dos minutos ya nos la devolvieron, vaya susto.

Conseguimos entrar al avión bastante rápido y el primer vuelo hasta Barcelona fue perfecto para echar una cabezadita y recuperar el sueño perdido por culpa de madrugar tanto. Y qué vistas teníamos por la ventana!

En el cambio de vuelo para ir de Barcelona a Londres, tuvimos que pasar por el control de pasaportes, todas iban un poco nerviosas de enseñarle los documentos a los guardias de la Policía Nacional, pero de nuevo no hubo problemas. Una vez llegamos a la puerta, aprovechamos para comer los bocadillos que llevábamos de casa, aunque algunos pillos prefirieron ir a comer al Burger King que había dentro del aeropuerto.

Una vez llegamos a Londres, después de unas dos horas de vuelo, nos recibió la reina Isabel II…

Vaya forma infalible de asegurarnos de que no nos habíamos equivocado de sitio.

Parecía que el trayecto iba llegando a su fin, pero no! Recogimos las maletas, que llegaron todas en perfecto estado, y nos sacamos alguna fotito más todas juntas.

Sin embargo, de ahí nos fuimos a pillar el bus que nos dejaría en la residencia. El trayecto duró otras 2 horas y media, porque Bath no es que esté muy cerquita de Londres, pero se nos hizo ameno con algunas de las chicas poniendo canciones de Chayanne y Melendi, siestas y mucha conversación.

Lo bueno es que de camino pasamos al lado del Stonehenge! Aunque la mayoría de las chicas y chicos estaban más interesados en las vacas blancas y negras y las cabras que también nos cruzamos.

Al llegar vino el director de Ardmore a buscarnos, dejamos las maletas rápidamente y nos fuimos a cenar a las 18:45 (una hora más en España). Va a ser difícil acostumbrarnos a cenar tan pronto, pero con todas las actividades que nos esperan, seguro que siempre habrá hambre. Como podéis ver en la foto, algunos chicos se atrevieron con la comida marroquí que nos sirvieron en lugar de la pasta con tomate, y aunque decían que estaba un poco picante, estamos muy orgullosas de que se arriesgaran.

Al terminar, nos enseñaron el Campus donde se harán todas las actividades y las clases de Inglés y podrán disfrutar de su tiempo libre. Es precioso y hasta vimos patos, gaviotas y ardillas!

Por último les hicieron una prueba de nivel para colocarlos en las clases, pero nos han dicho que todas tenían un nivel muy alto! Enhorabuena chicas y chicos, no esperábamos menos.

Al llegar a las 21h de nuevo a las habitaciones, en las que chicas y chicos están separados en edificios contiguos, les explicamos algunas cosas y se pusieron a deshacer las maletas y seguro que a hacer mil llamadas para contar su experiencia en el primer día.

Finalmente, antes de dormir tuvieron que decidir cómo separarse en dos grupos, quedando 12 para el grupo de clases por la mañana  y otras 12 para el grupo de clases por la tarde. Fue un poco difícil, pero se llegó a un acuerdo en el que todas y todos quedaron contentos, porque total siempre se vuelven a juntar en las comidas, las actividades nocturnas y por supuesto en los fines de semana!

Para la gran mayoría nuestro día terminó a las 23h, hora en la que estábamos ya roncando en cama, porque nos teníamos que despertar a las 7h el día siguiente, pero algunos decidieron quedarse en la zona común jugando a las cartas… cuanta energía que tienen!

Mañana os contaremos lo que les toca hacer hoy, que va a ser un día movidito.

Un saludo,

Alba Zels e Irene Pérez.

Alba Zels Garrido