Buenos días desde Cranbrook una vez más, os gustará saber que ayer disfrutamos de uno de los días más soleados hasta el momento y no sé si el único que tendremos, pues el huracán Lorenzo está de camino.
En realidad, no nos importa demasiado, estamos aquí para disfrutar sea como sea.
Del colegio no os puedo contar muchas novedades, todos los días se parecen, la rutina está clara y dominada. Os gustará saber que todos nuestros chicos y chicas están siendo muy puntuales, no sé de que nos viene esa fama de impuntuales cuando estamos en el extranjero.
Ayer por la tarde nos fuimos a la playa con otros tres grupos de adolescentes vigueses que viven también en Exmouth, y que son ya nuestros amigos y amigas.
En la playa jugamos al volley o una adaptación, al dodgeball, más conocido por nosotros como brilé, aunque con más pelotas, y al kickball, una especie de baseball pero con el pie.
La verdad es que les encanta pasar tiempo con los otros grupos, con algunos compartimos autobús por las mañanas pero a otros los vemos muy poquito y agradecen mucho una actividad como esta en la que nos juntamos casi todos.
Una vez más, tengo que mencionar a Carla, que debido a su lesión, y a pesar de apetecerle muchísimo hacer deporte, ha sido muy responsable y se ha mantenido al margen de los juegos. Sin embargo, dimos un paseo por la orilla, el agua del mar lo cura todo, y encontramos unos palos con los que nos entretuvimos un rato. Carla practica kung Fu, y yo, aquí donde me veis, practiqué karate muchos años, os enseño el resultado.
Estos chicos y chicas me sorprenden cada día, los voy a echar de menos cuando esta aventura termine.
Gracias a todos y a todas por leerme, un abrazo