Hoy, al terminar la jornada escolar, nos recogió un autobús que, como de costumbre, nos llevó hasta Exmouth y nos dejó en el centro, donde nos reunimos con una monitora local para comer y charlar todos juntos aprovechando que las lluvias nos dieron una tregua.
Al acabar el almuerzo, nos fuimos paseando a comprar un helado (algunos se atrevieron con sabores tan extraños como Rocky Road –chocolate con nubes y pepitas de chocolate-, caramelo con sal o tarta de banana y caramelo!) y de allí nos dirigimos a la bolera.
Una vez llegados a este lugar, nos asignaron tres pistas, por lo que nos dividimos en dos grupos de cinco jugadores y un grupo de cuatro. Primero jugamos con barreras metálicas a los lados para evitar que se los tiros se nos fueran muy desviados pero, al final, nos atrevimos ya a jugar sin ellas! Y no lo hicimos nada mal!
Después de un par de partidas, tiros con estilo y, sobre todo, muchas risas, volvimos dando un paseo con la playa de fondo hasta llegar a the Strand, la plaza del centro del pueblo, donde fuimos a dar una vuelta antes de coger el autobús de camino a casa.
Y ahora a descansar, que mañana nos espera Bath!
