Buenas noches familias
Ésta tarde nos dirigimos de nuevo dirección Poole, pero ésta vez no para ir de paseo por el pueblo vecino. Nuestro destino estaba a medio camino: la bolera.
Nos dividimos en grupos de 7, donde por supuesto se incorporaron nuestras maravillosas 😉 monitoras y Murray. Y dio comienzo la competición.
Con barreras. Sin barreras. Con la ayuda del aparatito amarillo. Sin la ayuda del aparatito amarillo. Con la bola de catorce quilos. No, no, a mí déjame de la seis kilos. Plenos. Semi-plenos. Cero puntos. Picaditas, gritos, aplausos. DE TODO. Ha sido genial.
Nos quedan 3 días de aventura por delante, hasta entonces, seguiremos informando.