Good evening families!

Como sabemos que tenéis muchas ganitas de leer lo que está pasando por aquí, preparaos que se vienen curvas (pero de las buenas). Después del homestay day del sábado, en el que nuestrxs chicxs han aprovechado para conocer un poquito más a las que serán sus nuevas familias, hoy tenemos que madrugar para poder disfrutar al máximo del destino de hoy: LONDON! Y es que somos unxs privilegiadxs porque podemos vivir en primera persona un hecho que marcará la historia de los británicos: el fallecimiento de Queen Elisabeth II.

Welcome to London!

A las 08.30 nos recoge Wos (nuestro busero de hoy) y Mathew (nuestro guide leader) pero hasta las 09.00 no podemos salir debido a despertadores que sonaron pero se apagaron con la misma rapidez. Allí, nos esperan sentados en los asientos de atrás los estudiantes del grupo de Poole, algo que realmente indignará a Pendientitos1 a la vuelta. Y tras dos horas de viaje y 30 minutos  llegamos a nuestro destino.

Roi G, Borja, Diego, Dani, Essien, Hugo, Saúl y Iago bajo en London Eye.

Lo primero que vemos es el skyline londinense que engloba la Westminster Abbey, el Big Ben y el London Eye. Comienza nuestro tour y nos dirigimos hacia el London Eye, la noria más alta de Europe  situada en el South Bank del río Támesis. ¿Adivináis cuántos metros de altura tiene? (podéis hacer vuestra apuesta en los comentarios).

A continuación, cruzamos Westminster Bridge andando, hecho también histórico ya que rara vez se ha cortado el paso a vehículos. Así es, que pudimos disfrutar de las estupendísimas vistas del Big Ben, por fin sin obras y sin tener que mirar por la ventanilla del coche. Esta torre alberga el reloj de cuatro caras más grande del mundo, el cual lleva en funcionamiento desde 1859 (casi ná). Seguro que podéis reconocerlo en cientos de películas ya que es uno de los más importantes símbolos culturales del país.​

BM 4 + 5 con el Big Ben y la Abadía de Westminster.

Continuamos el periplo y a cada paso que damos adentrándonos en el corazón de la city, nos encontramos con más gente cargando ramos de flores. Atravesamos como podemos las calles que llevan a Trafalgar Square, un monumento que conmemora la batalla de Trafalgar en la que la armada británica venció a las armadas francesa y española frente al cabo de Trafalgar, y que también hace de puerta del sol en Madrid en fin de año.

BM5 en Westminster Abbey and Big Ben

Por fin podemos llegar a la imponente entrada del Horse Gard, donde la guardia real siempre permanece inmóvil a lomos de preciosos caballos y una vez allí atravesamos la entrada de St. James Park, no sin antes encontrarnos con reporteros de RTVE (la 1 de toda la life) y contarles que estaremos 3 semanas por aquí gracias a Abel Caballero (por si quieren mencionarlo en las noticias).

Ya una vez en el parque monárquico más antiguo de Londres, dimos rienda suelta a nuestro apetito y abrimos nuestros packed lunchs mientras que los que ya se lo habían comido por el camino, aprovecharon para descansar un poquito en este santuario que acoge un lago con patos, cisnes, gansos y hasta pelícanos. Con la salvedad de que hoy, muchos de los trees tenían bajo sus troncos toooodas las ofrendas florales que los locals llevaban, con dedicatoria incluída, a Isabel II (a pesar de que a Essien no le quedase del todo claro quién había muerto).

Levantamos campamento 30 minutos después y nos vamos rumbo a Oxford Street, parada obligada para comprar souvenirs, más comida (en Kingdom of Sweets estarán eternamente agradecidos con Molares), y admirar los carteles publicitarios de  Picadilly Circus. Y una vez todos reunidos, y hecho nuestro recount de siempre, volvemos a desandar lo andado para poder ver de nuevo a Wos y pasar al mundo de los sueños (aunque sea por un ratito).

Laura y Saúl

Roi diciendo chao

Cuando llegamos a BM, a algunos aún les quedaban todavía ganas de pasarse un momentito por el KFC (debía ser para coger fuerzas para el camino a casa), pero una vez en la barrigola… Directiños para casiña!! Y hasta aquí el día de hoy, día histórico del que hemos formado parte y del que podremos presumir en unos cuantos años.

Ah! El London Eye tiene 135 metros!

Good night and sleep well! 

Leticia Lopez